Viajar sola
Con el propósito muy claro, aterricé en Zagreb para maravillarme con una ciudad encantadora plagada de calles acogedoras que te invitan a pasearla hasta la extenuación y mezclarte entre sus gentes en el mercado Dolac.
Con el propósito muy claro, aterricé en Zagreb para maravillarme con una ciudad encantadora plagada de calles acogedoras que te invitan a pasearla hasta la extenuación y mezclarte entre sus gentes en el mercado Dolac.